miércoles, 1 de diciembre de 2010


A veces simplemente llegas tarde, el tren ya lleva mucho tiempo encaminado a su destino.Sabes que no te podrás subir. Mala suerte.

...Y Solo necesitas abrazarle fuerte, muy fuerte, hasta que su perfume quede grabado en tu memoria. Hasta que su sonrisa aparezca cuando cierras los ojos, e incluso tal vez hasta que su mano acaricie tu cintura fundiéndoos en un mismo abrazo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario